Con un trozo de tela te cubriste los ojos y cruzaste la carretera que tenía 3 pistas por lado. Milagrosamente saliste ileso, entonces cruzaste el canal por un pequeño tronco sin caerte, seguiste caminando en dirección a los cerros, escuchaste ovejas y vacas, de pronto un caballo pasó corriendo por delante tuyo y fue inevitable que miraras, entonces volviste a cegarte para seguir caminando con paso seguro, una cerca te impidió el paso, pero en vez de devolverte la saltaste y caiste al lodo, entonces todo sucio notaste que el camino se iba empinando y te era más dificil seguir ... todo eso hasta que casi en la cima chocaste con un árbol, el único árbol en todo ese cerro.
¿Pero que diablos hacias ahi abajo con los ojos cubiertos, sucio y trepando?, que molesto, pero si yo estaba tan tranquila acá arriba sin nadie más. Si, yo estaba en la última rama de aquel árbol y tú venias subiendo de forma torpe hasta que llegaste a la rama que estaba al lado de la mia, eso me molestó bastante ... cuando me saludaste realmente pensé en irme.
"Te fijas la forma que toman esos edificios si los miras desde acá?" ... entonces miré hacia donde señalaste y me di cuenta de que se veian muy chistosos, fue inevitable reirme, pero luego te miré detenidamente, a pesar de que tus ojos estaban cubiertos sentí que podias ver mucho más de lo que yo podía, tus mejillas bajo el lodo estaban rosadas por el cansancio y habia un moreton en tu frente, lo toqué fuerte para ver si te quejabas y te ibas, pero para mi sorpresa no hiciste ni siquiera una mueca, para colmo sonreiste y me hablaste de la forma que tenian ciertos cerros y otras construcciones, empezaste a hablar mucho y me caias bien mientras hablabas, pero aun asi quería irme ... pero no podia irme, yo habia llegado primero, el problema es que jamas aprendí a hechar a nadie de un lugar que no me pertenece.
Pasaron los minutos y de pronto te callaste, pude escuchar una vaca a lo lejos ... de pronto me dio rabia que te callaras, de pronto quería que siguieras hablando, quería seguir escuchando esas comparaciones que hacías y esas historias de vivencias inexistentes, pero no hablaste, tu cara se puso seria y tuve miedo, realmente me asusté, crei que te ibas a ir ... yo quería que te fueras, pero si lo ibas a hacer tenias que decir adios.
De pronto, sin aviso alguno me empujaste, lo primero que pensé fue que por lo menos no te ibas sin despedirte, se que fue tonto, pero no puedo hacer nada ... me empujaste y en el ultimo momento me tomaste de la mano, tu estabas sentado muy tranquilo en tu rama mientras yo colgaba sujeta solamente de tu mano en un árbol demasiado alto como para librarme de una fractura o la misma muerte si me caia.
"Tonto" pensé.
"Te das cuenta de que si te suelto vas a caer?"
Asentí.
"Quiero que hables, quiero que me digas si quieres que te suba o si quieres que te suelte".
Yo ... yo no quiero caer, pero no quiero decirte que me subas, tonto, yo no iba a hablarte, asi que busqué la manera de zafarme y justamente vi que si me balanceaba un poco me podia apoyar en otra rama mas abajo. Cuando ya estaba en la otra rama me solté de tu mano y miré tu rostro inexpresivo, otra vez tuve miedo.
No estoy segura si fue un accidente o realmente fue tu voluntad, pero empezaste a caer y casi en un acto de reflejo te agarré la mano, ahora tu colgabas y mientras lo hacias la tela se cayó .. se cayó lentamente y al ver tus ojos comencé a llorar, ¿que diablos hacia yo llorando frente a un extraño?.
"Si no vas a hablar no tiene sentido que me ayudes, si caigo desde acá a lo mas quedo algo golpeado, no te preocupes"
"Tonto" volví a pensar.
Mientras lloraba me di cuenta de que mi fuerza no bastaba para subirte ... yo realmente no sabia que hacer, no te iba a soltar, pero no queria hablarte ¿por que era tan dificil de entender?, entonces yo ... si, yo no te subí ni te solté, yo te agarré más fuerte y me dejé caer, asi caimos los dos del árbol, fue una caida en camara rapida y lenta a la vez, fue un impacto del que no me di cuenta hasta que ya estaba en el suelo, lo único en lo que me fijé fue si nuestras manos seguian juntas o no.
No me podía mover, estaba muy adolorida, tu tampoco te movias y tenias los ojos cerrados, de pronto abriste tu boca.
"Tonta" dijiste.
Me rei, me rei muy fuerte, me rei hasta llorar y tu comenzaste a reir también, nuevamente comenzaste a hablar, me dijiste que un árbol siempre se veia lindo desde abajo ... me pareció tonto, pero mirandolo se veia realmente lindo con sus largas y gruesas ramas.
Me pregunstaste si me podía mover, entonces noté que a pesar del dolor si podia moverme, asi que asentí; sonreiste, soltaste mi mano y te levantaste, recojiste la tela que se había caido, la ibas a guardar en tu bolsillo cuando te la quité, me cubrí los ojos y te dije "me llamo Noelia creo que eres tonto pero aun asi podría decir que caminé diez mil millas para verte".
Juraria que reiste, me tomaste de la mano y comenzamos a caminar cuesta abajo y a pesar de que no veia nada y de que ya era de noche nunca me sentí tan segura.
¿Pero que diablos hacias ahi abajo con los ojos cubiertos, sucio y trepando?, que molesto, pero si yo estaba tan tranquila acá arriba sin nadie más. Si, yo estaba en la última rama de aquel árbol y tú venias subiendo de forma torpe hasta que llegaste a la rama que estaba al lado de la mia, eso me molestó bastante ... cuando me saludaste realmente pensé en irme.
"Te fijas la forma que toman esos edificios si los miras desde acá?" ... entonces miré hacia donde señalaste y me di cuenta de que se veian muy chistosos, fue inevitable reirme, pero luego te miré detenidamente, a pesar de que tus ojos estaban cubiertos sentí que podias ver mucho más de lo que yo podía, tus mejillas bajo el lodo estaban rosadas por el cansancio y habia un moreton en tu frente, lo toqué fuerte para ver si te quejabas y te ibas, pero para mi sorpresa no hiciste ni siquiera una mueca, para colmo sonreiste y me hablaste de la forma que tenian ciertos cerros y otras construcciones, empezaste a hablar mucho y me caias bien mientras hablabas, pero aun asi quería irme ... pero no podia irme, yo habia llegado primero, el problema es que jamas aprendí a hechar a nadie de un lugar que no me pertenece.
Pasaron los minutos y de pronto te callaste, pude escuchar una vaca a lo lejos ... de pronto me dio rabia que te callaras, de pronto quería que siguieras hablando, quería seguir escuchando esas comparaciones que hacías y esas historias de vivencias inexistentes, pero no hablaste, tu cara se puso seria y tuve miedo, realmente me asusté, crei que te ibas a ir ... yo quería que te fueras, pero si lo ibas a hacer tenias que decir adios.
De pronto, sin aviso alguno me empujaste, lo primero que pensé fue que por lo menos no te ibas sin despedirte, se que fue tonto, pero no puedo hacer nada ... me empujaste y en el ultimo momento me tomaste de la mano, tu estabas sentado muy tranquilo en tu rama mientras yo colgaba sujeta solamente de tu mano en un árbol demasiado alto como para librarme de una fractura o la misma muerte si me caia.
"Tonto" pensé.
"Te das cuenta de que si te suelto vas a caer?"
Asentí.
"Quiero que hables, quiero que me digas si quieres que te suba o si quieres que te suelte".
Yo ... yo no quiero caer, pero no quiero decirte que me subas, tonto, yo no iba a hablarte, asi que busqué la manera de zafarme y justamente vi que si me balanceaba un poco me podia apoyar en otra rama mas abajo. Cuando ya estaba en la otra rama me solté de tu mano y miré tu rostro inexpresivo, otra vez tuve miedo.
No estoy segura si fue un accidente o realmente fue tu voluntad, pero empezaste a caer y casi en un acto de reflejo te agarré la mano, ahora tu colgabas y mientras lo hacias la tela se cayó .. se cayó lentamente y al ver tus ojos comencé a llorar, ¿que diablos hacia yo llorando frente a un extraño?.
"Si no vas a hablar no tiene sentido que me ayudes, si caigo desde acá a lo mas quedo algo golpeado, no te preocupes"
"Tonto" volví a pensar.
Mientras lloraba me di cuenta de que mi fuerza no bastaba para subirte ... yo realmente no sabia que hacer, no te iba a soltar, pero no queria hablarte ¿por que era tan dificil de entender?, entonces yo ... si, yo no te subí ni te solté, yo te agarré más fuerte y me dejé caer, asi caimos los dos del árbol, fue una caida en camara rapida y lenta a la vez, fue un impacto del que no me di cuenta hasta que ya estaba en el suelo, lo único en lo que me fijé fue si nuestras manos seguian juntas o no.
No me podía mover, estaba muy adolorida, tu tampoco te movias y tenias los ojos cerrados, de pronto abriste tu boca.
"Tonta" dijiste.
Me rei, me rei muy fuerte, me rei hasta llorar y tu comenzaste a reir también, nuevamente comenzaste a hablar, me dijiste que un árbol siempre se veia lindo desde abajo ... me pareció tonto, pero mirandolo se veia realmente lindo con sus largas y gruesas ramas.
Me pregunstaste si me podía mover, entonces noté que a pesar del dolor si podia moverme, asi que asentí; sonreiste, soltaste mi mano y te levantaste, recojiste la tela que se había caido, la ibas a guardar en tu bolsillo cuando te la quité, me cubrí los ojos y te dije "me llamo Noelia creo que eres tonto pero aun asi podría decir que caminé diez mil millas para verte".
Juraria que reiste, me tomaste de la mano y comenzamos a caminar cuesta abajo y a pesar de que no veia nada y de que ya era de noche nunca me sentí tan segura.
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